Películas actuales recomendadas y reflexiones sobre algunos mensajes.

¡Buenas tardes!

¿Os acordáis del Conde Lucanor y de los estupendos cuentos de Patronio? Pues no sé por qué, pero a mí a veces me da por acordarme de la obra del Príncipe de Villena cuando veo una película que trae un mensaje que cala hondo en mi macaca persona.  En realidad,  esta entrada iba a ser para recomendaros unas cuantas películas entretenidas, hacer apología de Hollywood y esperar a que me inviten a alguna gala como la prima chica de King Kong. Pero algo siempre acaba cruzándose en mis primeras intenciones, y esta vez fue la tradición medieval, que por mucho que la tilden de oscura, para mí es el segundo pilar de Occidente.


Hoy os voy a hablar de películas que me han encantado. Por la inteligencia de sus diálogos, por su magnífico vestuario, por sus tramas y situaciones. Además, en algunas de ellas hay un tema que me ha parecido que se encuentra latente, pero que sale tímidamente a la luz : la desprotección infantil.

¿Nos echamos una sesión de cine?

LA BRUJA. UN CUENTO DE NUEVA INGLATERRA.

Película muy criticada por los amantes del cine no de terror, sino del susto y los miembros esparcidos. Fui a verla al cine (y después la volví a ver en casa con mi familia) y ya desde que aparecieron los créditos estaba escuchando críticas del público. "Pero si esto no da miedo", "No se ha visto nada feo", decían y decían, mi amado novio incluido ;). Pero el miedo en esta película tiene matices tan obvios algunos, como sutiles otros. De hecho, yo tuve que verla dos veces para darme cuenta de todos ellos.  Según mi parecer, para apreciar toda la aterradora belleza de esta película se han de tener en cuenta algunos factores como que estamos hablando de folclore, de que la presencia del mal es muy real en el plano físico, de que ese mal es un fin en sí mismo...Y lo que más me asustó, el que ninguno de los personajes supiera como protegerse, ni a su propia persona ni a los demás.

Ese descobijo es doble, material y moral. Esas personas luchan contra una tierra salvaje sin habilidades para ello, lo que los lleva a una desesperación digna del final que tuvieron. También luchan contra su propia naturaleza humana, sometida por la versión más dura del mundo protestante, siendo de notar como en toda la película no aparece ni un solo símbolo religioso, ni una cruz.

También hay una tercera desprotección, muy acusada a mi parecer. Me explico, otras críticas que he leído sobre esta película lo reducen todo a la idea de que la religión (cristiana) castiga el despertar sexual de los adolescentes y todo lo reducen a eso. Pues yo voy a reconducir la idea según mi experiencia y a decir que no se trata de eso, sino de que las mujeres en la adolescencia pueden estar expuestas, como le pasa a la protagonista, a las más diversas situaciones de desamparo. No me extiendo en este tema porque no es un blog de protección al menor (aunque ganas me dan de abrirlo),  pero muchas veces he visto con tristeza a padres verter una excesiva responsabilidad en una niña sólo porque su cuerpo ha alcanzado determinado tamaño o está aún desarrollando sus gustos al vestir. Sólo dejo este mensaje en el aire: proteger a tu hija y garantizar su correcto desarrollo como persona es mucho más importante que complacer a cualquier pareja/familiar/ o salir airosa de una situación.

Por último, especial atención en esta película merece la luz con que está rodada, el vestuario y por supuesto, los diálogos perfectamente adaptados a su tiempo. No soporto conversaciones coleguis en largometrajes de época.


LA VISITA.

Las penas con pan son buenas. Y el suspense terrorífico con humor, mejor que mejor.

Pese a ser una película que tiene sus sustillos (pero nada gore ni escandaloso), toda la trama está repleta de buen gusto, situaciones cotidianas y una visión profunda, abordaba sin complejos de los problemas que muchos chicos sufren por culpa del obrar de uno de los progenitores.

En cuanto a la historia de terror de la película, yo lo llamaría terror auténtico. Es decir, del que puede pasar en un mundo real, del que a veces te niegas a ver pero está ahí. De adolescente, yo era muy aventurera e iba a otros países a casas de desconocidos. Con el tiempo y cierta perspectiva de madurez...¡¡¡mucho me tendré que pensar yo ahora el dejar a unos niños en casas de gente que no conozco!!  La historia tiene matices teatrales al desarrollarse en espacios reducidos, y un cierto aire claustrofóbico, incrementado al final.  Y cómo no, los paisajes ayudan muchísmo.

En lo referente a la trama secundaria, los niños (adolescentes en realidad) están pasando por un duelo que tiene diversas manifestaciones que ellos son incapaces de controlar. Ese duelo se traduce en un injusto sentimiento de culpa y abandono, en un sufrimiento innecesario. Los padres no sólo deben prestar asistencia material a los hijos, sino también moral. Las decisiones de los adultos amparadas en episódicas explicaciones como "mi vida es mía y hago lo que quiero" tienen ciertos límites cuando otros dependen de ti.  No jugar con los sentimientos de un niño y no hacerle sufrir es mucho más importante que comprarles una consola cada cumpleaños. Prometido.


LA MODISTA.

Una gran película se mire por donde se mire.  Repleta de personajes muy singulares, a los que se les puede llegar a coger cariño, y otros verdaderamente mezquinos. Remordimientos, errores del pasado que se tratan de enmendar o que se niegan, son algunos de los elementos clave de la película.

He de destacar el magnífico vestuario, que me hizo acordarme totalmente de Oscar Palomares, autor del blog Le Style et moi.  De hecho, todo el largometraje es como un gran desfile, pero situado en un lugar un poco ingrato para la tarea.  Y más allá del vestuario, brillan con luz propia dos ideas: la auto superación y la redención.

La protagonista es una mujer fuerte, hecha a sí misma a partir de una tremenda injusticia que sufre en su infancia. No hay mal que por bien no venga, se podría decir.  Pero el caso es que el mal siempre atrae mal y es su propia fuente de alimentación para posteriores desgracias. Y de aquí mi última reflexión sobre la desprotección infantil : en primera instancia está en manos de la familia proteger a un niño, el última (pero muy importante), de las autoridades públicas.   A mi parecer, las personas que intervengan como profesionales en procesos en los que esté en juego el destino de un menor deben poner mucha más rectitud y esfuerzo en su proceder que en la redada antidroga más importante del año, por poner un ejemplo.  Os aseguro que ese esfuerzo evitará otros tantos en el futuro.



LOS ODIOSOS OCHO.

Con esta peli, que por cierto es estupenda, se acaban mis moralinas ;). No salen niños, sino adultos ya bien hermosotes.

Tarantino me gusta, me chifla. Adoro sus diálogos, el razonamiento de sus personajes, la recreación de situaciones inverosímiles que acaban como el Rosario de la Aurora. Y como buena almeriense, la vuelta de tuerca que le ha dado a los western tradicionales.

Disfruté esta película de principio a fin. Por su escenario, podría ser perfectamente llevada al teatro. Ya que hablo de teatro, pude apreciar aires de las obras de Ágata Christie en ella, lo que me supuso una grata sorpresa.  Y de sorpresas va la cosa, porque las hay.  Por otra parte, sigue la estructura tradicional de presentarnos las diversas escenas en capítulos, que al mismo tiempo nos darán pista sobre lo que puede pasar.

Si no eres muy sensible a la violencia y a los mamporros, podrás pasar un buen rato canalla de la mano de Los Odiosos Ocho. El Lejano Oeste es salvaje, sus métodos también lo son ;).

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¿Tenéis ya listas las palomitas para este fin de semana?

Un abrazo,
el mono Gretel.